lunes, 2 de marzo de 2009

Frágil y Desnuda

Lejos de mi familia viajaba en compañía de un grupo de personas que algunos sentimientos albergaban en mi corazón, mientras viajaba mi razón estaba expectante de lo que podría pasar en aquel lugar que hasta esos momentos era un verdadero misterio… cuando llegamos al lugar quedé sorprendida por la belleza, pero lo mas llamativo del lugar no era nada comparado con la belleza de él… un chico de lentes y cabellos largos, se acercó lentamente y me saludó con una gran alegría, cuando me abrazó mi corazón latió con mucha fuerza… cuando nos separamos y continuó saludando a las demás personas mis ojos lo siguieron por unos minutos, volví a la realidad cuando se acercó una amiga que no veía hacía mucho tiempo, caminamos hasta donde alojaríamos los días que estaríamos en aquel lugar, para mi sorpresa el chico estaría en el mismo lugar que yo. Con el pasar de los días comenzamos a notar las cosas que teníamos en común y nuestra “Amistad” parecía de años y no de unos cuantos días, sin darme cuenta comenzamos un juego de seducción que me pareció muy entretenido hasta que mi corazón comenzó a latir con una fuerza diferente, era un hecho… me sentía atraída por él, mis ojos se iluminaban cada vez que lo veía y sus ojos tenía un especial brillo cuando me veía, una noche caminando por una pradera vi una estrella fugaz que me asustó mucho, me abrase de él… mi corazón latía con fuerza, mis manos temblaban, estaba súper nerviosa… él me pidió que estuviera tranquila, pero me sentía demasiado cómoda en sus brazos… nos quedamos mirando y él me beso… los días que vinieron estaba súper contenta me sentía muy bien, era increíble que tuviéramos los mismos gustos en la mayoría de las cosas… la ultima noche que estaría en aquel lugar, me tomó la mano y me llevó a una pequeña cabaña cerca de un lago, estaba iluminadas por velas y había un aroma muy especial, el ambiente estaba muy romántico, como salido de mis pensamientos, de pronto miré hacia atrás y había una cama con pétalos de rosas, en ese momento mis mejillas se sonrojaron lo besé, estaba nerviosa, era mí primera vez y quería hacerlo, él desabrocho lentamente la camisa que llevaba puesta, me tomó en sus brazos y me llevo a la cama, cuando terminó fue como un sueño, bello de principio a fin, me levanté de la cama con el cuerpo desnudo, lo vi recostado iluminado con la sutil luz de la luna que entraba por una de las ventanas… y sonreí, entré en una pequeña habitación pues necesitaba estar sola, cuando salí él ya no estaba ahí… camine hacia la cama iluminada por la luna y me senté, me sentí frágil y desnuda, pero contenta, era el mejor final a esa aventura… y por sobretodo el mejor final para una historia… que nunca olvidaré.

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