Quiero ser el compás de tu
acuarela, ser la geométrica de tus metáforas... A mi música le pinto la
partitura de mis ciencias, de la historia... no es mi cuestión social... pero
mi arte es el arte en todas las materias, no son sólo palabras, pues mientras
te escribo esto, mi mente viaja por tonos musicales, añadido de colores,
colores que tu mente nunca podría imaginar. Quiero entender la raíz cuadrada de
tus problemas. Quiero ser el binomio perfecto para la soledad y para esa
tristeza insana que se disfraza entre mi biología incompleta. Quiero medir tus
ángulos y volverlos complementarios y suplementarios a mi sistema
interplanetario de esquizofrenia y de mala orientación... quiero que seas mi
norte y mi sur... encontrarte en el este y perderme en el oeste, mientras los
astros se disfrazan de ecuaciones simples. Mientras con tu mirada perdida en el
horizonte dibujas lugares en cuerpos geométricos pequeños. Pequeños como los
versos que dejamos olvidados en el baúl... Tonteras decía mi padre... son solo
pasatiempos reclamaba el tuyo, mientras nuestra religión, nos llevaba a vivir
encerrado en la pasión de producir textos... en los momentos en los que tomabas
tu guitarra y con una simple nota podías solucionar completamente las
divisiones de tus pensamientos y como multiplicábamos el tiempos en buenos
momentos, restamos importancia a las palabras y sumamos alegrías al corazón,
nos paseamos entre el drama y la comedia... miramos la tragedia con miedo y desazón.
Pero, el mundo nos preparó otra cosa... nos contaron las horas y nos obligaron
a vivir sin sonidos y en mundo grises... TE FALTA FILOSOFÍA... gritaba mi
padre... mientras nuestras miradas melancólicas no asociaban la palabra... oía
a políticos con sus términos sin entender palabra alguna... ahora me preguntó...
qué habría sido de Neruda sin sus palabras... Qué sería de mi Violeta sin su
guitarra... qué sería de la Negra Ester sin sus miles de rostros... qué sería
de mi si no tuviera los dedos para escribir... qué sería de todos sin la
creatividad que aflora en todo momento... que nace de ese sentimiento que
produce la música... un libro... una representación teatral... me dijeron que
no era necesario y cometí errores por olvidar mi arte... pues el arte está en
todos lados en todas partes y en todas las personas... me vendaron los ojos y
por poco pierdo la visión... Hay arte en mis materias pues con ellas compongo
una ecuación compleja que llene tu sistema nervioso central con los matices de
una rosa cromática, con mi filosofía existencialista... Te digo que recuerdes
el tiempo pasado cuando el día se te iba con el pincel en la mano... como
cuando ese chico chascón se paseaba con la guitarra... porque en tu tiempo
pasado se dibujaron los momentos en que mi país vivió sin colores... Te
recuerdo que nunca dejaste de soñar con una vida simple... pero te perdiste
entre los gritos de tu padre... en la falta de cívica que nunca te enseñaron y
llegaste odiar el arte... pues se te negó... ahora le quitas a un niño la
posibilidad de viajar por mundos propios... Te recuerdo que sigo soñando, sin
olvidarme que vivo en tiempo presente.
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